Llena y desbordada,
salpicada por tu viento
batallo con la brújula
que te empuja.
La mentora de tu viaje,
rehúye alianzas
y sortea puertos.
Agito los brazos
en tu orilla austral
mientras el catalejo ciego
de vida, me disuelve
ante tus ojos.
Justo escarmiento
por procurar imposibles:
Atracar un velero libre.
Poner límites a la búsqueda.
Poseer el mapa del tesoro.
Garantías de ser.
Asumo penitente mi osadía
y escucho el eco que llora
abrazado a la niña que me habita.
Rabieta que se pierde en tu infinito
esbozando entre gemidos:
Mi velero sueña con tu velero
y mi sur sueña con ser tu sur.
4 comentarios:
Ya tienes el rumbo, no lo pierdas, que yo te sigo de cerca.
Besos.
a la mierda la brújula, suelta cabos y lleva tu velero al abordaje, navega apasionada y sin hacer prisionersos..
hermoso, muy hermoso!
Crees que habrá penitencia en un abrazo estrenduoso?... La niña que te habita, la que te habitara mañana, un velero navegando por el sur...
Y yo con mis puntos suspensivos, oteando el océano...
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