Vamos a ser muy felices

Esperar anestesia los sentidos
que habitan mis entrañas.
Me debo a su palpitar vivo,
a su agitar inquieto.
Escoltadme, custodios de mi plétora;

Para hacerme la ciega
y despertar a la belleza.

Para envolverme en tu aliento
y en la dama de noche.

Para degustar a mis amantes
y ofrecer mi sabor sin reservas.

Para tocarme el ombligo
y acariciarte la cara.

Para escuchar mi esencia
y reírme de tus cantos de sireno.

¿Conformareis mi harem de percepciones?
¿Sí?
¡Qué emoción!
¡Voy a casarme conmigo!